Un circo a tres pistas

Me siento ante esta hoja en blanco y antes de empezar a escribir la primera palabra me doy cuenta que he cambiado tres o cuatro veces el tema sobre el que voy a escribir, no es algo voluntario, es que mi cabeza últimamente va así.

No soy una persona que se disperse con facilidad, tampoco te creas que soy el summum de la concentración, simplemente soy una persona normal, que se marca unos objetivos, intenta cumplirlos y, a veces, hasta lo logra. Es cierto que puedo saltar de una cosa a otra con relativa facilidad, pero no sería menos cierto decir que son saltos atados a la cuerda de la curiosidad en la práctica mayoría de las veces.

Quizá por eso el titular Un circo a tres pistas a esta entrada en este casi abandonado blog sea algo justo, porque esa es la sensación que tengo en este momento de mi vida. Me veo haciendo malabares en un circo a tres pistas que intento mantener en relativo orden mientras evito que los bolos caigan al suelo.

Esa es mi vida, y aunque parezca lo contrario no me quejo , en líneas generales, soy una persona bastante feliz. No tengo grandes problemas, tengo personas a mi lado que me quieren y que me apoyan día a día en las pequeñas cosas, que son las realmente importantes...Es fácil demostrar el apoyo a una persona cuando decide hacer, o no hacer algo trascendental. Para mí lo difícil es saber demostrar el apoyo a alguien cuando en el día a día hace una pequeña cosa que parece intrascendente o simplemente egoísta.

Algo del tipo levantarte temprano un festivo para adelantar trabajo, o irte al gimnasio mientras dejas a la familia comenzando el día, o no sacar la basura porque estabas leyendo algo y se ha pasado la hora...

Bueno, como iba diciendo soy una persona que ha aprendido a relativizar, esto es algo vital en mi trabajo, he tenido la suerte de aprender que las cosas de trabajo son simplemente cosas de trabajo, no puedes gustarle a todos, no puedes hacerlo todo bien (aunque lo intentes) y, sobre todo, no puedes llevarte las mierdas de los demás a tu casa. Especialmente si tu trabajo consiste en resolver problemas.

Ah, y también puedo decir soy una persona que ha aprendido a decir NO, aunque de una forma muy sutil y educada, intentando no hacer daño a los demás a la vez que intento darles alternativas para cubrir el hueco que mi "no" haya podido causar.

Otra cosa importante que he aprendido es la importancia de la expresión "ser lo suficiente", "tener lo suficiente"... saber que siempre podrías ser más o tener más pero que eso no va a hacer que todo sea mejor.

Esto puede chocar de entrada con el concepto de la mejora continua en el que creo firmemente pero yo creo que si lo analizas fríamente puedes llegar a la misma conclusión que llegué yo, no son conceptos excluyentes. Puedes ser feliz con lo que tienes pero esforzarte por ser mejor y el hecho de seguir iterando hasta que consigas mejorar al arrancarle la ansiedad por no conseguirlo deja de frustarte porque ya eres feliz.

Puede sonar confuso pero, qué demonios, a mi me funciona... además, ahora que lo pienso si yo había venido aquí para hablar de mastodon y de lo que estoy disfrutando, aunque creo que ya es suficiente por hoy y mejor lo dejamos para otro día, ¿no?.