El cine en 3D
Y por una vez hemos de reconocer que no hemos salido del cine con la sensación de haber tirado el dinero a la basura. En primer lugar porque la entrada del cine en Benidorm es realmente barata (si lo comparamos con el precio en otras ciudades). La entrada para una película en 3D nos ha costado 7,50€, mientras que para una película normal cuesta 5,50€ un precio bastante alejado de los que se suelen ver en las salas de otras ciudades.
Evidentemente la sala no es tan pichi-megaguay como en otros cines de reciente creación, aquí la sala se asemeja más a esos multicines a los que íbamos de críos que lo mismo valían para proyectar una película que para hacer una obra de teatro, a pesar de todo he de decir que las butacas eran cómodas… y menos mal porque la dichosa película de avatar es realmente larga (aunque no se me haya hecho pesada).
Respecto a la película… lo único que te puedo decir es que tienes que verla, aunque la historia sea predecible y relativamente simple, pero es que la producción es una auténtica pasada, no sólo por la aplicación del 3D, sino porque las escenas de animación son realmente increíbles, la integración es asombrosa y espectacular.
Hacía mucho que no iba al cine… y ahora recuerdo porqué. No iba al cine porque las últimas películas que había visto dejaron mucho que desear, y con el precio que tienen las entradas en la mayoría de los cines, como que no apetece jugársela y dejarse una pasta en una película que no merece la pena… mucho menos cuando han acortado tanto el ciclo de vida de los estrenos y a los pocos meses puedes disfrutarlas en la comodidad de tu hogar en la plataforma de pago de turno… (y si no quieres esperar siempre hay métodos alternativos para que te lleguen los estrenos, eso sí menos legales).
Reconozco que me encanta el cine, soy un cinéfilo hasta la médula, pero también me gusta invertir mi tiempo y mi dinero con dignidad. No me importa pagar un dinero por ver una buena película, y mucho menos me importa pagar un añadido por verla en 3D, a cambio sólo pido una cosa…
Que las producciones que se estrenen tengan unos mínimos de calidad, o que al menos el precio sea adecuado al producto que vamos a ver.
Por el bien de la industria, señores cineastas, sean realistas con la calidad de las películas, señores propietarios de los cines, o de los derechos de las películas, no mezclen churras con merinas y no nos cobren lo mismo por una producción de oscar que por una de “cine de barrioâ€ÂÂ, ustedes no pagan lo mismo por un Kilo de Gambita de Huelva fresca que por uno de gambas de criadero congeladas ¿verdad?
Sean honrados con los espectadores, sus clientes y ellos lo serán con Ustedes.