El atuendo
Desde los tiempos inmemoriables la gente, tanto los jóvenes como los no ttan jóvenes han clasificado al traje como una prenda de vestir opresora, que les quitaba sus libertades y les incomodaba.
Puede que debido a la falta de costumbre, a la inadecuación en el uso, o por el simple recuerdo de su utilización en bodas y similares eventos tengamos razones para brindarle la inhóspita acogida que acostumbramos, pero yo quiero romper una lanza en defensa de ese desprotegido trozo de tela que con tanta elegancia prende de la percha…
Trajes hay tantos como saludos, uno para cada ocasión así que no tenemos que castigarlos a todos por el mal uso que solemos hacer del nuestro, porque la gran mayoría sólo tiene un traje, el de las ocasiones.
Hombre yo no es que tenga veinte trajes en el armario (porque no puedo…) pero si que tengo trés, dos para trabajar y uno que es, para no variar, el de las ocasiones…
Y no es que por ir de traje me gaste más dinero en ropa, todo lo contrario, hago una o dos inversiones fuertes en el año (entre 150 y 250 € cada una), a poder ser coincidiendo con las segundas rebajas de Adolfo Dominguez (aunque este año no me ha convencido lo que tenían…), y con esto me gasto menos que si me tuviera que comprar pantalones diferentes que llevo tanto para trabajar como para salir, al menos es una forma de diferenciar los momentos, de romper con el trabajo al llegar a casa y quitarte el traje, por no decir lo cómodo que es el saber cada mañana lo que te has de poner, no tienes que buscar una chaqueta que combine con los pantalones… como mucho puede que necesites algo de consejo femenino a la hora de elegir la corbata, pero esa es la mayor de tus dificultades.
Y todo esto si lo miramos desde el punto de vista de uno mismo, que si lo miramos desde la óptica de los demás, no es lo mismo la imagen que se da llevando cualquier ropa que llevando un traje, siempre es más agradable que te atienda una persona amable aseada y bien arreglada que una persona amable y bien aseada pero menos arreglada, al menos en mi trabajo al estar de cara al público tódo el día en un despacho es así.
Con esto no quiero decir que siempre se deba llevar traje para todas las ocasiones o trabajos, cada cosa es para un momento, cuando uno trabaja en una oficina es correcto e incluso deseable llevar traje (eso si, siempre que tu jefe lo lleve), pero si nuestro trabajo se reduce a otros ámbitos, puede ser que desentonemos con el mismo y que hagamos sentir incómodo a nuestro público
o no?