Discriminación

Llega un momento en que a todo el mundo, hasta aquellos que tienen una paciencia infinita llegan a su límite.
Hoy yo he llegado al mío en lo que a la inmigración respecta. Que conste, como lo ha hecho en otras ocasiones que de entrada no estoy en contra de los inmigrantes, estoy en contra de los caraduras. Estoy en contra de aquellos que se aprovechan de estar en una teórica situación de desfavorecimiento para abusar flagantemente de los demás.

Estoy más que cansado de aquellos que entienden lo que quieren, como y cuando quieren, estoy cansado de todos aquellos que se saltan las normas y sobre todo las esperas alegando no entender.

Llegando a este punto me daría exactamente igual la procedencia de las personas que hiciesen lo descrito, pero faltaría el detalle clave…
Realmente me sacan de quicio aquellos inmigrantes que cuando les llaman la atención y les indican que esperen su turno salen con un discurso antirracista acusándote poco menos que de haberlos degradado faltando al respeto de todos en una reacción desmesurada, mostrando que la mejor defensa es un buen ataque.

Aunque claro, gente maleducada la hay en todos los paises y de todos los colores