Descendencia

 Este es uno de esos post que tarda en salir del horno, uno de esos que te pegas mil días dándole vueltas en la cabeza y que a pesar de saber lo que quieres decir y de tenerlo todo estructurado mentalmente no sabes como va a quedar.

Hace ya unos meses que la palabra descendencia volvió a mi mente, seguramente desde que el querido aprendiz nos dijo que iba a ser padre, o desde que dos de mis primas (y encima hermanas) me dijeron que al fin iban a ser mamás, la verdad es que no tengo mi idea, lo que sí que se es que me encantan los críos, y que haber tenido en brazos a Víctor, el primero de mis primos-sobrinos ha despertado del letargo esa extraña sensación de querer (eso sí en un futuro) tener un bebé.

Puede que esto parezca una locura, y no voy a negar que lo sea, pero tampoco negare que en esta vida sólo dos personas me han hecho sentir algo así… con una fué simplemente imposible, a la otra espero conservarla por muchos años, y puesto que ambas saben quienes son, para que decir nada más… 😉